Año 2019

Los angeles bajaron del cielo La gente comenzó a desaparecer dejando únicamente un rastro de materia orgánica. Los sonidos de los animales fueron absorbidos por cantos celestiales, poco sabíamos que estos cantos no eran cantos gregorianos ni cantos llanos eran ecos de las personas desaparecidas, ecos que retumban entre dimensiones y de estas dimensiones se escuchan los ecos de lo que fue y lo que nunca será. Pronto seguiré yo Puedo sentirlo en los huesos Cada que lo escucho llama mi nombre Reclama mi sangre Pide entregar mi sucio cuerpo Pronto seguiré yo y no podría ser más feliz.